Cuando hablamos de transporte sanitario nos referimos al traslado o desplazamiento de personas enfermas, de mayor o menor gravedad, con vehículos especialmente condicionados y preparados para tal fin. En Grup La Pau somos expertos en transporte sanitario, ya sea urgente o no urgente, pues nos avalan más de 35 años de experiencia y un equipo altamente cualificado y preparado para ello.
Como hemos avanzado anteriormente, según el estado y gravedad del paciente, podemos dividir el transporte sanitario en urgente y no urgente.
El transporte sanitario urgente es aquel que consiste en el traslado de personas -enfermos o accidentados- en situación grave y/o crítica, hasta el centro hospitalario más próximo con las máximas garantías. Como bien indica su nombre, este tipo de transporte debe efectuarse en el menor tiempo posible, pues de ello depende en parte la vida del paciente.
Para este tipo concreto de transporte sanitario se emplean diferentes unidades médicas acondicionadas con la última tecnología para velar por la salud del paciente. La flota de la cooperativa se compone de:
Como hemos avanzado anteriormente, todo el transporte sanitario urgente cuenta con la participación de personal médico, que atiende la emergencia, garantiza la estabilidad del paciente y asegura el traslado de este con las máximas garantías y el mínimo tiempo. Este equipo médico está formado por:
Finalmente, es interesante destacar que el transporte sanitario urgente puede ser de tipo prehospitalario o interhospitalario o secundario. En el primer de los casos nos referimos al traslado de personas desde donde ha ocurrido la emergencia hasta un centro médico de referencia. El segundo de los casos se caracteriza por el traslado sanitario de pacientes que necesitan atención técnico-sanitaria de otros hospital o centro médico y el consiguiente traslado.
Aclarado el primer tipo de transporte, ahora nos fijaremos en el transporte sanitario no urgente, que es aquel que implica el traslado especial de personas, que sufren alguna imposibilidad física o por causas clínicas, que no pueden utilizar el transporte ordinario para acudir hasta el hospital o centro médico.
Así pues, la principal diferencia entre el transporte urgente y no urgente es que en el primero la salud y vida del paciente está en riesgo, mientras que en el segundo no se teme por su vida. Uno de los ejemplos de transporte sanitario no urgente sería el traslado de un paciente desde su casa a un determinado hospital para realizarse una prueba médica o asistir a rehabilitación. También se incluye aquí el transporte entre centros médicos u hospitales, así como el trayecto desde el centro médico hasta la casa del atendido.
De la misma manera que en el urgente, el transporte sanitario no urgente también cuenta con el personal especializado para garantizar el correcto traslado del paciente.
De esta manera, en este tipo de transporte intervienen el conductor técnico de emergencias médicas (TES), los Técnicos Sanitarios de Emergencias y el auxiliar con certificado profesional de transporte sanitario.
Para este tipo de transporte se utilizan las siguientes unidades:
Es interesante destacar que el transporte sanitario no urgente puede ser programado, es decir, si ha sido contratado con 24 horas de antelación, o no programado, cuando se da en un momento determinado y no previsto, como por ejemplo un alta de urgencias o prueba médica o diagnóstica en otro hospital o centro sanitario.